Reflexiones con Coelho

Quiero compartir dos escritos de Paulo Coelho que leí  recientemente y que invitan a la reflexión.

El campo de rosas

:-) 

"Un viejo sabio chino caminaba por un campo de nieve cuando vio a una mujer llorando.
-¿Por qué lloras? -preguntó él.
-Porque me acuerdo de mi pasado, mi juventud, la belleza que veía cuando me reflejaba en el espejo, los hombres que amé. Maldigo mi memoria. Recuerdo la primavera de mi vida y quiero llorar.

El sabio contempló el campo de nieve, con la mirada fijada en un punto. En un determinado momento la mujer paró de llorar y se dirigió a él.

-¿Qué estas mirando?
-Un campo de rosas. Gracias a mi memoria, aunque sea invierno y todo esté triste y nevado, puedo recordar el hermoso campo de rosas de primavera y sonreir."

Somos nuestros pensamientos. Y según vemos las cosas, así nos sentiremos. Podemos maldecir las dificultades de una situación que estamos viviendo o añorar un buen recuerdo con tristeza, o podemos fijar la vista en lo bello que tenemos, proyectar un futuro y sonreir por estar aquí.
La sonrisa y el buen ánimo pueden crear lo que deseas y derrotar las penas.
Tu decides con qué visión te quedas, la que te hace ser feliz o la que te hace llorar.

El sapo y el agua

"Varios estudios biológicos demuestran que un sapo colocado en un recipiente con el agua de su propia laguna, se queda inmóvil mientras estamos calentando el líquido. El sapo no reacciona al gradual aumento de la temperatura y muere cuando el agua hierve, hinchado y feliz.

Por otro lado, si dejamos a otro sapo caer en ese mismo recipiente con el agua ya hirviendo, saltará fuera inmediatamente. Medio chamuscado, ¡pero vivo!

En ocasiones, somos sapos hervidos. No nos damos cuenta de los cambios. Nos parece que todo marcha muy bien, o que lo que no anda bien va a pasar, que es sólo cuestión de tiempo. Estamos a punto de morir, pero nos quedamos flotando, estables y apáticos, en el agua que no deja de calentarse minuto a minuto. Acabamos muriendo, calentitos, hinchaditos y felices, sin haber llegado a sentir los cambios que se producían a nuestro alrededor."


Hay muchos sapos hervidos por ahí, que mueren en vida, dejando las oportunidades pasar, olvidando lo que esta sucediendo, esperando ¿a qué?, manteniendose parados por comodidad en la rutina, hinchaditos y calentitos y con miedo a dar un paso que les saque de su "caldero". Otros, sin embargo, reaccionan a tiempo, luchan por una vida de verdad, toman iniciativa, son conscientes de sus posibilidades, cumplen sueños.
Tú decides ¿hinchadito y calentito dejandote morir? ¿o saltando y con heridas luchando por vivir?